A las 10.30 horas de este lunes en la residencia La Abubilla, en la localidad oscense de Yéqueda, se percibía «ilusión y orgullo» por empezar a trabajar «y luchar» contra el coronavirus. Este centro residencial, que debería haber abierto sus puertas la semana pasada pero el estado de alarma pospuso su inauguración, ha sido elegido por el Gobierno de Aragón para ser una de las instalaciones en la que ingresar a personas mayores contagiadas, pero que no requieren ingreso hospitalario. Ofrece un total de 47 plazas.

«Sanidad y Servicios Sociales consideraron que esta residencia reunía dos requisitos fundamentales. Por un lado, la opción de abrir de forma rápida y pronto ante la urgencia de la situación y, por otro, que no hubiera usuarios», explicaba a este diario Mateo Ferrer, director de La Abubilla. «No podíamos decir que no y enseguida tendimos la mano. Fue la DGA quien contactó con nosotros porque cumplíamos el perfil de la instalación que querían y nos sentimos orgullosos de tener por delante este reto», indicó Ferrer. «Codo con codo vamos a intentar aportar nuestro granito de arena y lo más importante es que vamos a poder salvar la vida de pacientes, especialmente a un colectivo muy vulnerable», consideraba el director.

La Abubilla ya tenía demanda y usuarios residentes que iban a estrenar las instalaciones la semana pasada, pero el giro de los acontecimientos ha hecho que este espacio tenga que estrenarse en otras condiciones. «Las familias lo entendieron y fueron las primeras en ser conscientes de la urgencia de la situación», añadió Ferrer.

Dado que todo estaba preparado en este centro de Yéqueda, el personal previsto (más de 25 personas) harán su función asistencial, pero a ellos se sumarán los sanitarios (médicos y enfermeras) que aportará la consejería de Sanidad. «Haremos una simbiosis y estaremos un equipo completo en todos los turnos para dar atención directa a los pacientes que lleguen», dijo Mateo Ferrer.

Zaragoza y Teruel

Mientras la instalación de la provincia de Huesca ya está abierta, la DGA ultima los detalles para abrir dos más en Zaragoza esta semana, aunque todavía no se ha determinado cuáles serán. Estas ofertarán 180 plazas. El recurso de Teruel, el cuarto que el Ejecutivo habilitará para acoger a estos pacientes contagiados, también está por determinar.

La estancia en estos centros será de 14 días y 48 horas sin síntomas y un resultado negativo en la prueba del coronavirus. Solo en este caso los mayores podrán regresar a sus residencias. El objetivo de esta medida es evitar que el virus se propague en centros de mayores y contagiar a personas sanas.