Jesús Burrell lleva años radicado en Lérida, donde preside la Asociación de Empresarios de Torrefarrera, y facilitando las relaciones comerciales con La Litera, su comarca de origen. El binefarense expone su preocupación por el ambiente que está viendo en los últimos días, con la jornada de huelga del viernes como máximo exponente, aunque la situación lleva tiempo caldeada, según explica.

«Hoy (por el viernes) estamos todos parados, no podemos hacer gran cosa. Hay miedo a abrir, porque a la gente se le va la olla. Ha cerrado la Seat, con eso está dicho todo. Hemos cerrado todos los polígonos, al menos todos los que yo conozco, porque tampoco tenía mucho sentido abrir, no íbamos a poder hacer nada», contaba.

«Al final somos dos bandos, la gente que no se da cuenta de lo que están haciendo y los que pensamos que este ambiente se les va a volver en contra, porque están quemando negocios catalanes. Yo pienso que ya hay más personas en contra de las movilizaciones que a favor», afirmaba.

«La realidad de la vida en Cataluña es que no puedes expresar lo que piensas abiertamente, tienes que saber a quién se lo dices. Pero esto pasa desde hace mucho tiempo, cinco o seis años, no es de ahora. No es que si lo dices vayas a tener reacciones en contra, pero si dependes de la Administración, lo pasas mal. Y no solo nos pasa a los de fuera, también a la gente de aquí», exponía el empresario.

«En mi posición institucional, debo decir lo que veo que piensa la gente, pero lo que pienso a nivel personal, me lo guardo», añadía.