U n millón de puestos de trabajo hasta el año 2020. Ese es el caramelo del plan avanzado ayer por el experto en turismo Manuel Figuerola durante la primera jornada del I Congreso Internacional de Turismo Zaragoza 2014, que reúne hasta hoy a profesionales del sector y coincide con la primera hornada de egresados en el título universitario, en el quincuagésimo aniversario de la Escuela de Turismo Universitaria de Zaragoza.

Se trata de un trabajo elaborado con el respaldo de la Universidad de Nebrija que será presentado próximamente al Gobierno central y que pretende mejorar el rendimiento económico del principal motor de la economía española porque a su juicio, "no va mal, pero no como debiera ir". Mediante la inversión de 350.000 millones de euros (50.000 al año), lograría la creación de 600.000 empleos directos y 400.000 indirectos. Invirtiendo en formación y renovando el 1% de la capacidad hotelera, el peso del turismo en el PIB se elevaría al 14,8%. "Ahora hay que hacer un turismo para generar empleo", recalcó.

El experto en estructura del mercado turístico realizó un análisis crítico del sector español, sin miramientos: "Hay que incrementar la satisfación del cliente, no tenemos la calidad que deberíamos dar. Tenemos que trabajar más el producto, la comunicación y la coordinación de los agentes porque el sector privado no se comunica bien". Figuerola apostó por mejorar la formación del personal, diversificar los productos y aumentar el gasto medio del cliente: "Existe en los medios una obsesión por los millones de turistas que llegan a España, pero luego resulta que el gasto medio por noche de hotel es de poco más de 40 euros", analizó. Un problema, el del gasto discreto, que no le sucede a otras potencias turísticas: "Francia, con la mitad de estancias, ingresa más que España. Y en Estados Unidos ya no digamos. No necesitamos más turistas, sino de más calidad", señaló.

Delante de muchos de los primeros titulados del grado en Turismo en Zaragoza, apostó por la especialización, criticó el plan Bolonia "por mantener vicios del pasado" y defendió una "formación más directa, más práctica, basada en la innovación".