La consejera de Salud y Consumo del Gobierno de Aragón, Luisa Noeno, cree que la oferta de plazas MIR debe ampliarse, ya que "en la próxima década vamos a tener la necesidad de contar con nuevos especialistas que garanticen un adecuado relevo generacional". La consejera, durante el acto de despedida de los médicos residentes de esta promoción, explicó que el 40% de los especialistas de los hospitales aragoneses tiene ahora entre 45 y 54 años, cuando ese porcentaje es del 26% en la Unión Europea.

En opinión de la consejera, "este dato nos obliga a anticiparnos a la necesidad progresiva de incorporar nuevos profesionales, para lo que será imprescindible, en coordinación con el resto de las comunidades autónomas y en el seno de la Comisión de Recursos Humanos del Sistema Nacional de Salud, ampliar las ofertas de formación MIR en aquellas especialidades más deficitarias, como Cirugía General, Anestesia, Radiología, Anatomía Patológica o Traumatología". Según datos del Departamento de Salud y Consumo, la edad media de los especialistas que trabajan en Aragón es de 49 años.

Luisa Noeno, que se ha referido a las oportunidades que ofrecen las nuevas tecnologías para mejorar la eficacia del trabajo clínico y al liderazgo de Aragón en el Proyecto Guía Salud, ha recordado que el objetivo fundamental que comparten los gestores del sistema público de salud y sus facultativos "es ocuparse de los problemas de los ciudadanos, averiguar sus expectativas y darles una respuesta adecuada", sin olvidar un reto personal y profesional: "Hay que aprender a aprender".

EL PERFIL DEL FUTURO El doctor y catedrático Luis Angel Rioja, presidente de la Comisión de Docencia del hospital Miguel Servet destacó en su intervención que la sociedad va a demandar un perfil profesional "de eficacia y eficiencia", así como una medicina caracterizada por "la toma de decisiones basada en la evidencia, las habilidades y técnicas instrumentales, el trabajo en equipo y el uso racional de los recursos".

En ese sentido, añadió que "no pueden olvidarse las actitudes, que tal vez se centran en el terreno laboral y la dinámica social, y que no deberían dejar de lado la afectividad, la generosidad, la entrega, el estudio, el afán de superación, el rigor ético y la inquietud intelectual, que son consustanciales a una profesión excepcional para aplicar nuestros conocimientos al enfermo".

El acto concluyó con la entrega de los premios a la excelencia MIR, que desde hace tres años otorga el Servicio Aragonés de Salud (SALUD) para reconocer los méritos acreditados por los facultativos durante este periodo de formación.

Una de las galardonadas, María Victoria Villaverde Royo, Premio Médico de Familia, señaló a los medios que es un día "muy especial", ya que "a partir de ahora podemos tener responsabilidades propias".

La facultativa agregó que en la especialidad que ha desarrollado en el Miguel Servet, durante tres años, es "muy complicado" buscar trabajo dentro de Aragón, pero que reciben muchas ofertas de fuera, sobre todo en la costa y de contratos temporales.