El Consejo de Gobierno aprobó ayer el anteproyecto de la nueva ley de juventud de Aragón, una norma que pretender responder a los cambios sociales y a la principal preocupación de la juventud, el empleo.

De esta forma, todo lo que hará el Instituto Aragonés de la Juventud con arreglo a esta ley estará dirigido a generar capacidades que aporten empleabilidad a los jóvenes, en coordinación con otros departamentos del Gobierno, así como la organización de actividades y campamentos, según explicó el consejero de Sanidad, Bienestar Social y Familia, Ricardo Oliván, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno. Aragón cuenta con 211.095 jóvenes, el 21,78 % de la población total de la comunidad, y el objetivo de la norma es mejorar su calidad de vida y fomentar su participación e integración.