Cuatro años después de lo previsto y cuatro semanas después de estar operativo, la directora general de Tráfico, María Seguí, inauguró ayer el nuevo centro territorial de control del organismo en Zaragoza, técnicamente de Pirineos y valle del Ebro, que también da servicio a Navarra y La Rioja. Aunque en caso de necesidad, explicó, el centro aragonés ubicado en la Expo podría dar soporte de control a la red viaria de todo el país (salvo Cataluña y el País Vasco, que tienen la vigilancia transferida), una capacidad que solo comparte el centro de Madrid, de los siete estatales.

El centro, quizá gracias al retraso en su estreno --aunque lleva más de dos años teóricamente preparado, tras 8,5 millones de inversión--, cuenta con la última tecnología y una "estética" que también comparte con la sede central madrileña, que puede verse habitualmente en la información televisiva de tráfico. Así, cuenta con un videowall --una gran pantalla central subdividida-- que complementa a las de cada trabajador que controla un aspecto específico del tráfico, como pueden ser los accidentes, los avisos de los paneles informativos o las alertas meteorológicas que afecten a la circulación.

Una estructura de la que presumió Seguí, aunque según fuentes consultadas tiene algunas carencias, como el hecho de que la orientación de los puestos de trabajo dificulte mirar a la pantalla central. Aunque estos y fallos podrán corregirse a medida que se engrase la maquinaria.

Los trabajadores del centro cuentan para la vigilancia de las vías de alta capacidad --2.685 kilómetros en la zona-- con 78 cámaras de televisión, 150 paneles de mensaje variable, 166 estaciones de toma de datos, 183 puntos de control para el cálculo de tiempos de recorrido, 72 cinemómetros y 55 estaciones meteorológicas, según detalló la Delegación del Gobierno en Aragón.

Seguí destacó en su presentación ante los medios que "el grueso" de la reducción de accidentes y víctimas de tráfico de los últimos años se ha dado en las vías de alta capacidad, autopistas y autovías, fundamentalmente, en parte gracias a la vigilancia y sistemas de alerta.

AVISOS AL COCHE

Estos avisos se realizan, entre otras vías, con los paneles informativos, pero el problema sería replicar la infraestructura en las carreteras secundarias, las que ahora preocupan más. Para ello, según avanzó, la DGT ultima un nuevo sistema de avisos dirigidos directamente a cada vehículo, cuyos detalles se conocerán pronto.