Los desencuentros entre los miembros de la Asociación de Vecinos Gaspar Torrente y la Junta Municipal de Santa Isabel no son nuevos. El primer capítulo de tensión se produjo cuando el presidente del distrito, Agustín Martín (CHA), retiró de la mesa presidencial de los plenos las sillas destinadas a los representantes de la asociación de vecinos. Este gesto se interpretó como un ataque personal del nacionalista contra el presidente del colectivo, Isaac Garza, militante socialista que fue alcalde de Santa Isabel cuando todavía era barrio rural. A este episodio le siguió un duro choque verbal en un pleno con Agustín Martín y con el vicepresidente, el socialista Angel Gálvez. La discusión estuvo a punto de acabar con los puños.