Los trabajos de rehabilitación de la estación internacional de Canfranc avanzan paso a paso. El Gobierno de Aragón publicó ayer el acuerdo con la escuela superior de Conservación de Bienes Culturales para desarrollar en los meses veraniegos una nueva fase (previsiblemente la última) en las tareas de recuperación del inmueble.
El acuerdo publicado ayer en el BOA, con financiación enteramente pública hasta un máximo de 17.506 euros, contempla además la construcción de prototipos y elementos decorativos necesarios para la reconstrucción de los lienzos objeto de intervención. De hecho, el principal escollo de estas tareas que se repiten por tercer año consecutivo es la falta de materiales originales, pues el 90% de sus esculturas, molduras, cornisas y capiteles se han perdido por culpa del abandono.
Una de las actuaciones previstas en esta fase de recuperación es la retirada del escudo franquista que se colocó en los años cuarenta. Además, el dictamen que autorizó su desmontaje para cumplir con la legislación de memoria histórica consideró que no será necesario reponer por una copia el emblema original de Alfonso XII.
El vestíbulo mantiene en su interior varias taquillas de madera que en su momento fueron bancos y kioskos de prensa. También se pueden ver restos del incendio de 1931, como un cuadro eléctrico totalmente calcinado. Las obras de restauración de la sala estarán terminadas el próximo mes de julio.
