La tierra volvió a ceder ayer de nuevo en Tauste provocando gran preocupación en la mayor parte de los vecinos. En torno a las tres y media de la tarde se produjeron nuevos desprendimientos en la peña sobre la que se asienta la torre mudéjar de la localidad, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Fuentes de policía local informaron de que se trataba de un desprendimiento de terreno que afectó especialmente a una de las paredes de una de las viviendas asentadas justo encima de la peña que soporta la torre.

Al parecer se abrió una nueva cueva de unos 9 metros de profundidad incrustada en la pared. Según uno de los testigos que presenció el corrimiento de tierras, "se oyó un gran estruendo y se vieron cómo caían abajo piedras y tierra".

ZONA ACORDONADA En principio no se lamentaron daños personales, ya que la zona está totalmente acordonada y las casas desalojadas desde los desprendimientos de hace unos días, aunque los derrumbes de la jornada de ayer "han dejado colgadas parte de las casa de la parte superior", según informaron fuentes próximas al ayuntamiento.

Con este nuevo desprendimiento son dos los sustos que lleva la villa de Tauste desde que se produjeron las impresionantes tormentas de principios de mes.

Todo comenzó cuando el pasado viernes 10 de septiembre se desplomaba el muro de contención de una peña sobre el que se asienta la torre Mudéjar, en el interior de un patio de la calle Rey Artieda. Además, la caída de este muro dejó al descubierto una serie de cuevas, algunas de 8 metros de profundidad, incrustadas en la peña en dirección a la torre.

Los vecinos que fueron evacuados debido al desplome comentaban entonces que llevaban quejándose "desde hace varios años de filtraciones", pero las tormentas del pasado 7 de septiembre, "fueron la gota que colmaron el vaso".

Este nuevo desplome se ha producido justo cuando los responsables del consistorio taustano estaban a la espera de recibir esta semana la visita de los técnicos del Cedex --Centro de Investigación el Ministerio de Fomento-- quien deberán encargarse de determinar el grado de estabilidad de la zona afectada. Según el alcalde de Tauste, José Luís Pola, "este estudio geotécnico es el paso previo a cualquier actuación posterior"en un enclave único.