La preocupación que existe para estudiar en el exterior no solo pertenece a los alumnos españoles, sino también a los que optan por estudiar en Aragón. El vicerrector de la Universidad de Zaragoza (UZ), Francisco Beltrán, destaca que una de las principales novedades este año había sido el «importante» descenso de estudiantes entrantes. Las noticias sobre la propagación del covid-19, tanto a nivel nacional, como en concreto en Zaragoza, han provocado una caída de casi el 50% de estudiantes de fuera. El año pasado en la UZ se registraron 868 solicitudes para estudiar aquí y este año van por 419. Aunque, según explicó Beltrán, estas cifras no son definitivas porque el plazo de inscripción para estudiar fuera el segundo semestre permanece abierto hasta el 11 de noviembre, pero aun así no se podía hacer una previsión de futuro por la situación actual.

Aunque en la universidad zaragozana se va a «funcionar como si fuera un año normal», Beltrán señaló que desde el vicerrectorado de estudiantes se habían dado recomendaciones a la hora de viajar fuera, como estar al tanto de las novedades en los países de destino mediante las oficinas de relaciones internacionales o, más importante, la recomendación de realizar la experiencia Erasmus en el segundo semestre.

Esta situación se ha traducido en que este 2020, respecto al año pasado, han disminuido un 7% las solicitudes: 1.124 este año frente a las 1.209 del año 2019. No obstante, el vicerrector se sorprendió al notificar que hasta 840 estudiantes de la Universidad de Zaragoza se estaban preparando para realizar la movilidad en septiembre, lo que significaba que la experiencia Erasmus seguía teniendo «un gran atractivo», así como contaba con el «compromiso» de los estudiantes.

Las recomendaciones del campus público aragonés hicieron efecto. Beltrán aseguró que se había notado cierto incremento en las solicitudes para estudiar fuera tan solo el segundo semestre y que algunas universidades, como una alemana, ya habían informado de la suspensión de la movilidad de estudiantes entrantes para el primer semestre, y otras, habían comunicado que sus clases seguirían un formato online.

«Durante este curso daremos las máximas facilidades para que hagan su estancia o para que se puedan incorporar a sus estudios, facilitando la normativa», aseguró el vicerrector de Unizar. Algunos estudiantes de la Universidad de Zaragoza ya han comenzado su andadura por tierras extranjeras, otros se irán en septiembre y otros esperará al segundo semestre que comienza en febrero. Todo depende del calendario de clases y exámenes que establece cada institución. No obstante, muchos de estos estudiantes que tenían claro el año pasado o los primeros meses de este año 2020 tan atípico que querían estudiar fuera, han cambiado de decisión. El covid-19 ha ganado la partida o truncado los intereses de muchos jóvenes.

El vicerrector de la UZ informó de una cifra preocupante y es que el número de renuncias a su plaza en la universidad de otro país había aumentado este año, antes de comenzar el mes de septiembre. El año pasado se registraron 125 renuncias frente a las 284 que se han notificado este año.

A pesar de que las cifras han mostrado un descenso en, prácticamente, todos los apartados, la conclusión que se extrae es que todavía los alumnos siguen queriendo estudiar fuera, aunque estudiar aquí proyecte miedo.