Los obispos aragoneses acudirán el próximo domingo a la tradicional visita al Vaticano, en la que se encontrarán con el papa Francisco, presentarán un informe sobre cada diócesis y hablarán de los bienes de la Franja con el dicasterio correspondiente, el departamento vaticano especializado en el tema.

Sin embargo, y debido a que en su reunión con el papa el día 3 de marzo estarán presentes todos los obispos españoles, fuentes de la diócesis de Barbastro-Monzón han explicado a EFE que probablemente no sea un asunto que se trate de forma directa con el pontífice sino con la sección del Vaticano antes mencionada.

Los bienes reclamados, propiedad de las diócesis de Barbastro-Monzón y de Huesca, permanecen en la actualidad en el Museo Diocesano de Lérida, a pesar de la sentencia del supremo tribunal de la Signatura Apostólica que legitima su propiedad.

En esta visita, que se realiza cada cinco años, los obispos de la archidiócesis de Zaragoza y de las diócesis de Tarazona, Huesca, Barbastro-Monzón y Teruel y Albarracín permanecerán en Roma del 23 de febrero al 4 de marzo.

El jueves, 27 de febrero, los prelados de Aragón realizarán la visita a las congregaciones romanas, dicasterios y pontificios consejos y el 3 de marzo será el día del encuentro de todos los obispos españoles con el papa Francisco.

El establecimiento de esta tradición es fruto de la reforma de la iglesia a partir del Concilio de Trento y de la constitución "Romanus Pontifex", firmada por Sixto V (1585), que durante más de trescientos años dictó las principales normas y reglas para este acto.

En la visita se entregará un informe sobre el estado de cada diócesis: su origen, extensión, población, número de católicos, el estado de la curia, los sacerdotes y parroquias, el seminario, los religiosos y otros temas de importancia.