Un incendio ocurrido a mediados de febrero en Castejón de Monegros, con un herido grave, disparó todas las alarmas. La comarca se dio cuenta de que la carencia de un servicio de bomberos puede tener muy graves consecuencias.

"No tenemos servicio de incendios y los bomberos de Fraga, los primeros profesionales en llegar, tardaron 45 minutos", manifiesta Ana Puey, la alcaldesa.

"No tenemos ni parque de bomberos ni bomberos en un territorio tan grande como Vizcaya", reconoce Alfonso Salillas, presidente de la comarca de Monegros. "Disponemos de un servicio de Protección Civil que solo está capacitado legalmente para los incendios forestales".

En la actualidad, la comarca dispone de 12 autobombas repartidas por su extenso territorio, a cargo de voluntarios o de los propios ayuntamientos, apunta Salillas, que denuncia que, con el recorte presupuestario, "es imposible crear y mantener un servicio antiincendios".

El problema de los incendios urbanos en Monegros tiene difícil solución. Con 2.800 kilómetros cuadrados y 20.500 habitantes repartidos en 49 municipios, es casi imposible que todo el territorio, con 100 kilómetros de norte a sur, esté bien preparado frente a este tipo de siniestros.

"Lo deseable sería contar con un parque de bomberos propio", afirma el presidente comarcal, que señala que ahora dependen del servicio que reciben de los parques de las comarcas limítrofes, como Huesca y Fraga.