Un total de ocho personas han fallecido en accidentes de tráfico durante 2012 en la capital aragonesa, ha informado el Ayuntamiento de Zaragoza.

Así, el Consistorio ha indicado que Zaragoza capital mantiene sus buenos niveles de seguridad vial, tras la revisión de los datos estadísticos correspondientes al ejercicio 2012, que se ha cerrado con 8 personas fallecidas, el mismo número que la media del quinquenio anterior; 122 personas con heridas graves, un 20,3 por ciento menos que en la media del quinquenio; y 966 personas con heridas leves, un 23,4 por ciento menos que en la media del quinquenio 2006-2011.

Según el Ayuntamiento de Zaragoza, la cifra de fallecidos supone un repunte respecto al año anterior, pero, "si se compara con los datos de años precedentes, se observa que es la tercera más baja desde 2001 y, sobre todo, que se mantiene en los valores medios de los últimos cinco años. De los 8 fallecidos, 3 eran conductores de ciclomotores, 2 de motos, 2 peatones y un ocupante de turismo".

Estos números vuelven a poner el acento en la vulnerabilidad de las motos y motocicletas y señalan la necesidad de seguir intensificando los esfuerzos para que estos conductores extremen las medidas de seguridad cuando circulen por la ciudad. De la misma manera, la estadística de 2012 vuelve a señalar la existencia de atropellos mortales, un accidente típicamente urbano y especialmente preocupante por la gravedad de sus lesiones.

Hay que destacar la reducción de heridos graves, que no ha dejado de descender desde 2003, cuando comenzó aplicarse el Plan de Seguridad Vial y que demuestran el esfuerzo de la Policía de Zaragoza por controlar los excesos de velocidad y por hacer respetar los pasos semafóricos, de manera que las posibles colisiones que puedan producirse generen los menores daños posibles. En 2012 se han contabilizado 122 heridos graves; un 20,3 por ciento menos que a media del quinquenio (153). Esta misma tónica se ha seguido con los accidentes leves.

Un total de 3.274 accidentes

En 2012 se registraron un total de 3.274 accidentes (un 5 por ciento menos que la media del quinquenio) de los que 910 fueron con lesionados. Además también se redujeron en un14,3 por ciento los delitos contra la seguridad vial.

De este tipo de delitos, los más habituales son los que se cometen por conducir bajo la influencia del alcohol (un 39 por ciento del total de los delitos o con tasa superior a la legalmente permitida).

No obstante, entre los primeros, se registraron a 405 conductores, que supone un 14 por ciento menos que la media. También se observa una merma de personas que optaron por conducir superando la tasa (227), que suponen un 38 por ciento menos que la media.

Respecto a la presencia de los efectos de las drogas, el número de infractores (25) no experimenta variaciones respecto a la media. Hay que recordar que estas pruebas se realizan cuando el conductor demuestra una conducción anómala y da negativos en las pruebas de alcoholemia.

El año 2012 también presenta en sus datos una caída de las negativas al sometimiento de las pruebas (38 personas, que suponen un 39 por ciento menos) y de las conducciones temerarias, en las que se detectó a 9 conductores, un 55 por ciento menos que la media, situada en 20. Sin embargo se han mantenido los excesos de velocidad (18) personas.

También hay un claro retroceso en los delitos por conducir sin los pertinentes permisos. Estas situaciones que se comienzan a controlar desde 2008 con la entrada del carnet por puntos arrojan cada año datos menos abultados.

Así, se han contabilizado 139 personas por conducir sin puntos (un 8,6 por ciento menos que el cuatrienio 2008-2011); 56 por privación del carnet por sentencia judicial (un 12,5 por ciento menos) y 100 personas por circular sin haber obtenido nunca el carnet (un 59 por ciento menos).

Calidad de vida

La Concejalía de la Policía Local, que dirige el consejero Carlos Pérez Anadón, considera la reducción de accidentes como un elemento asociado a una buena calidad de vida "y es una aspiración en la que nos debemos de empeñar cada día", aunque son muchos elementos de distinta índole los que inciden en una conducción segura.

Por eso, se reiteran los llamamientos a los conductores, a los ocupantes de los vehículos y a los peatones para que realicen sus desplazamientos desde el respeto, la solidaridad, la atención y la responsabilidad.