El frente frío de origen polar que azota el norte de la Península desde el sábado entró ayer con fuerza en Aragón, donde provocó un descenso generalizado de temperaturas que, en las zonas de montaña de las tres provincias, se vio acompañado de la caída de abundante nieve, lo que causó graves complicaciones al tráfico rodado.

El empeoramiento de las condiciones meteorológicas estuvo en el origen de varios accidentes de tráfico, como los que bloquearon durante horas la autovía A-2 a la altura de Calatayud, Alhama y Arcos de Jalón. En todos ellos se vieron implicados camiones, por lo que Tráfico prohibió la circulación de vehículos pesados en ambos sentidos de la A-2 a su paso por la provincia de Zaragoza.

Además, en Gea de Albarracín (Teruel), unos cuarenta coches estuvieron atrapados por la tarde entre la nieve, hasta que la carretera pudo ser limpiada con máquinas.

Muchas localidades registraron valores por debajo de cero y los vientos fuertes del norte y del noroeste que soplaron en distintos puntos del territorio, sobre todo en el valle del Ebro, contribuyeron a incrementar la sensación de frío.

Las nevadas caídas durante el día de ayer obligan a circular con cadenas en los principales puertos pirenaicos y en numerosas carreteras secundarias del Prepirineo y las comarcas turolenses del Maestrazgo, Albarracín y Gúdar-Javalambre, así como en las Cuencas Mineras y en la zona del Jiloca. En el resto de la red todavía sigue siendo necesario circular hoy con precaución por la posible presencia de placas de hielo.

Nevó copiosamente en el puerto de Somport, hasta el punto de que fue necesario colocar cadenas para circular entre Villanúa y Astún. También eran imprescindibles en Portalet, en Cerler, en la entrada al túnel de Bielsa y entre Benasque y Llanos del Hospital. En la Jacetania, la nieve complicó el tráfico entre Hecho y Ansó, en San Juan de la Peña y en la vía que enlaza con Aísa desde la N-330.

En la provincia de Zaragoza, la nieve cubrió a primeras horas de la mañana la autopista AP-68 entre Gallur y el límite con Navarra, el puerto de Paniza y los llanos de Mainar, la N-122 entre Magallón y Tarazona, el somontano del Moncayo y la N-234 a la altura de Torrelapaja, así como el puerto de Sos (A-137).

En la autovía de Madrid (A-2) la nieve afectó a 80 kilómetros, entre los puntos kilométricos 180 y 260, que incluyen los puertos de Cavero y El Frasno y el alto de la Perdiz. En esta misma vía, el hielo estuvo en el origen de dos choques en cadena que se produjeron a la altura de Calatayud cuando los conductores de varios vehículos pesados perdieron el control de sus camiones, que se cruzaron en la calzada. La retención se prolongó por espacio de una hora y veinte minutos, de las 16.09 a las 17.29 horas, en sentido Barcelona; y dos horas, de las 16.18 a las 18.17, en sentido Madrid.

Tráfico desplegó ocho parejas de la Guardia Civil en la zona de los accidentes, donde se formaron colas kilométricas que todavía continuaban a últimas horas de la tarde debido a la colisión de dos camiones en Alhama a las 19.00 horas y al hecho de que, al estar cortada la A-1 (Madrid-Irún), parte del tráfico de esta autovía se desvió hacia Aragón.