La situación no va a mejorar y la gripe seguirá in crescendo. La razón es sencilla, el virus se ha adelantado por lo que se espera que sea a finales de enero cuando se produzca la punta de la epidemia. Así lo dijo ayer el consejero de Sanidad, Ricardo Oliván, quien fue muy claro: "vamos a ver más casos de gripe A" en los próximos quince días, cuando es más común que se genere una mayor incidencia del virus.

El consejero pretendió amortiguar la alarma al señalar que este año la gripe está evolucionando de "una manera muy similar" al episodio que se produjo en el 2012. En el 2009, sin embargo, fallecieron 13 personas.

Oliván aseguró que los casos de enfermos afectados por la enfermedad son más de los que están ahora mismo en los centros de la comunidad. "Hay muchos aragoneses con gripe", dijo, y "sin ningún problema más allá de pasar unos días en la cama". Insistió en que los que se encuentran ingresados en el hospital tienen patologías previas que agravan la afección del virus, como el caso del primer fallecido en Aragón de 76 años por la gripe aviar el pasado martes en el Hospital Miguel Servet de Zaragoza.

Consciente del colapso que están sufriendo las urgencias de Zaragoza desde principios de año, Oliván pidió a las personas con síntomas de gripe que acudan en primer lugar a su centro de salud correspondiente y, además, volvió a aconsejar que se proceda a la vacunación contra el virus.