El consejero de Sanidad del Gobierno aragonés, Ricardo Oliván, se ha mostrado confiado hoy en que las obras de construcción de un centro de salud en el barrio de Los Olivos de Huesca puedan iniciarse a lo largo del mes de abril del próximo año.

Oliván así lo ha asegurado tras inaugurar la nueva planta de aguas de hemodiálisis del Hospital San Jorge de Huesca, ciudad a la que ha viajado también para distinguir a los responsables de centros de salud de la provincia que han obtenido la certificación ISO de calidad

El consejero ha explicado que los trámites "oficiales" para acometer el proyecto se iniciarán una vez el pleno del Ayuntamiento de Huesca tome el acuerdo de ceder los terrenos donde se ubicará el centro, próximos al nuevo Palacio de Justicia de la capital altoaragonesa.

Asimismo ha confiado en que el acuerdo municipal se adopte en "breves fechas" y que los trámites para la licitación del proyecto no se vean afectados por "alegaciones o recursos" que pudieran demorar los plazos previstos por su departamento.

Por otra parte, el titular aragonés de Sanidad ha rechazado que la decisión de su departamento de modificar los horarios de asistencia de atención pediátrica en el municipio de Ayerbe (Huesca) supongan un menoscabo de la calidad del servicio prestado.

Con esta afirmación, Oliván ha salido al paso de los actos reivindicativos llevados a cabo en la zona afectada contra la modificación acordada, y de las voces críticas surgidas entre los profesionales sanitarios.

Tras resaltar que "los portavoces de la administración no son los profesionales sino la propia administración", el consejero ha señalado que la nueva fórmula acordada garantiza "más horas y más días" de atención.

Ha señalado que el análisis de los datos de asistencia a la consulta de pediatría, que se lleva a cabo los lunes, habían aconsejado modificar el servicio para prestarlo los miércoles y viernes en jornadas de tres horas.

Oliván, para quien este cambio es de "sentido común" ya que facilitará la atención pediátrica a las familias, ha instado a las autores de las críticas a "poner negro sobre blanco y decir como era el servicio de pediatría en 2011 o en la actualidad, y cual va a ser a partir de ahora".

"Pero insisto -ha añadido- los portavoces de la administración no son los profesionales, y menos los que tienen intereses profesionales" que pudieran verse perjudicados con la medida.