El consejero de Sanidad del Gobierno de Aragón, Ricardo Oliván, defendió ayer la integración del Consorcio Aragonés de Salud de Alta Resolución (Casar) en el Salud y dijo que la asistencia, la cartera de servicios y los trabajadores van a seguir siendo los mismos. "Lo único que va a notar el paciente es el cambio de bata del profesional", aseguró el consejero durante su visita ayer a los centros del Casar de Ejea de los Caballeros y Tarazona, en la provincia de Zaragoza.

Oliván señaló que, en la integración del Casar en el Salud, "la asistencia, la cartera de servicios y los trabajadores van a seguir siendo los mismos, pero ahora van a estar bajo el paraguas del Salud" y rechazó la privatización de la que se le acusa desde varios sectores. "Aquí estamos demostrando que apostamos por un servicio sanitario público y, ejemplo de ello, es la integración del Consorcio, que es una fórmula sanitaria no estrictamente pública, bajo el paraguas público que es el Salud", explicó.

Para Oliván lo más importante es la "cuestión asistencial" y, en este sentido, afirmó que los profesionales "van a salir ganando", pues los médicos se van a integrar en los servicios correspondientes a su especialidad del hospital de referencia. "Gracias a ello, los profesionales ganarán en conocimiento de casos y participarán en las sesiones clínicas del resto de compañeros del servicio y, en consecuencia, adquirirán una mayor destreza y experiencia. Eso es bueno para el personal y, en definitiva, para el paciente", dijo.

Oliván añadió que, actualmente, hay cuatro grupos que están trabajando en los aspectos asistenciales, jurídicos, laborales y económicos de este proceso para ir instrumentando medidas conducentes al objetivo de que "en 2014 el Casar esté totalmente integrado en el Salud" y anunció que ya se ha reunido con los alcaldes implicados, la MAZ, sindicatos y, a lo largo de esta semana, con los trabajadores.