El Gobierno de Aragón solicitará a la Generalitat de Cataluña que se haga cargo del comportamiento del oso Goiat y que cese su política de reintroducción. Este plantígrado está considerado «problemático» por los agentes de la naturaleza que siguen su rastro y se le considera el culpable de varios ataques a los animales de la cordillera pirenaica. El consejero de Desarrollo Rural, Joaquín Olona, mantuvo ayer en Plan una reunión con los alcaldes y ganaderos de la zona afectados por la reciente aparición en el valle de este ejemplar.

«No pedimos información ni datos sobre los osos reintroducidos a Francia y Cataluña, pedimos que desistan de su política de reintroducción y que se hagan cargo de los animales que, reintroducidos por ellos, nos causan todo tipo de problemas a nosotros», indicó el dirigente socialista. El objeto del encuentro fue el de conocer en detalle y de primera mano las inquietudes y preocupaciones surgidas como consecuencia de la detección de este plantígrado por primera vez en la comarca del Sobrarbe. Olona se comprometió a «solicitar formalmente y por escrito» a la Generalitat de Cataluña que se hagan cargo de este oso, ya que tiene un comportamiento anómalo.

El pasado domingo más de doscientas personas procedentes de distintos puntos del Pirineo se manifestaron con cencerros en esta localidad para protestar por la presencia de este ejemplar problemático en el monte.

Olona reconoció «ser consciente» del sobrecoste que la presencia de Goiat (u otros ejemplares) supone para los ganaderos y señaló que en absoluto deben ser quienes asuman los costes «a sus expensas». Por ese motivo hoy aparecerá publicada en el Boletín Oficial de Aragón (BOA) una nueva convocatoria de subvenciones, dotada con 400.000 euros, para ayudar a los ganaderos a mitigar los daños provocados por la presencia del oso y el lobo pardo en las zonas de Aragón donde hay constancia de su presencia.

El consejero recordó que estas ayudas son pioneras en Europa en la medida que su percepción no están condicionadas a los ataques propiamente dichos sino a la mera presencia de osos o lobos en el territorio. El importe medio de la ayuda percibida por los ganaderos en la convocatoria del año pasado fue de 5.600 euros y la cuantía máxima percibida fue de 14.200 euros.