El terrorista Francisco Múgica Garmendia, alias Pakito, fue operado ayer de la rodilla en el hospital Miguel Servet de la capital aragonesa. Este hombre fue el exjefe de ETA en los años del plomo, cuando la banda terrorista cometió los atentados más atroces (la casa cuartel de la Guardia Civil en Zaragoza, con once fallecidos, y el de Hipercor en Barcelona, con 21 víctimas). Pakito fue detenido junto al resto de la cúpula de ETA en Bidart (Francia) en 1992 y extraditado a España en 2000 para ser juzgado por el ataque en la casa cuartel, masacre por la que fue condenado a 2.354 años de prisión.

Múgica Garmendia cumple condena en la cárcel de Zuera debido a que renegó de ETA para acogerse a la Vía Nanclares (proyecto de reinserción de aquellos presos etarras que hayan decidido dar una serie de pasos inequívocos hacia el final de la violencia entre cuyas medidas está el acercamiento de internos a cárceles cercanas del País Vasco). La banda terrorista le suspendió de militancia.

Según la sentencia de la Audiencia Nacional, Pakito ordenó a Henri Parot que se trasladara a la capital aragonesa y colocara el coche bomba en la casa cuartel de la avenida Cataluña el 11 de diciembre de 1987. De vuelta, Pakito le entregó las llaves de otro turismo para huir.