Los partidos de la oposición cuestionaron ayer en las Cortes la fórmula que empleará el Gobierno para pagar la construcción del hospital de Alcañiz y criticaron que el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, no haya aclarado "todavía" cuándo estará listo el centro. "Solo sabemos que, según el consejero de Presidencia Vicente Guillén, las obras se licitarán en el 2016, pero no hay fecha prevista de finalización y eso es un problema", expuso Amparo Bella, de Podemos.

También el portavoz del PP, Fernando Galve, se preguntó "de dónde sacarán los fondos" para financiar el hospital y recordó que el consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, "ya digo que no hay dinero para infraestructuras". Al igual que PAR, a través de Berta Zapater, y Jesús Sansó (Ciudadanos), que también preguntaron al Ejecutivo "de dónde sacará el dinero" para afrontar el pago del hospital.

Los grupos se emplearon en esos términos durante la comparecencia de la Plataforma en defensa de los servicios públicos y derechos sociales en el Bajo Aragón Histórico en la comisión de Peticiones Ciudadanas, en la que exigió al nuevo Gobierno "información, transparencia y claridad" sobre la construcción del nuevo centro, incidiendo en su carácter 100% público, "desde su financiación hasta su gestión y la garantía de una sanidad pública, universal y de calidad para sus usuarios", apuntó su portavoz, Isabel Martínez, que recordó a PSOE, IU, CHA y Podemnos que firmaron un manifiesto en el que se comprometían a revocar la privatización de la construcción del hospital si esta no era de carácter pública, instando a que se sumasen a este compromiso a los que no lo hicieron. Ciudadanos prometió estudiarlo.

La plataforma valoró el compromiso del nuevo Gobierno de licitar el hospital en el 2016 y que este sea público --el anterior Ejecutivo adjudicó su construcción a la UTE integrada por las constructoras OHL e Iridium y utilizó, por primera vez en un centro hospitalario, la concesión de obra pública a una empresa privada--. Sin embargo, advirtió que no van "a dejar de vigilar, exigir y velar" por su cumplimiento.

Martínez pidió a los grupos parlamentarios que "trabajen para que su construcción se haga con la mayor agilidad posible" y calificó el proyecto de construcción puesto en marcha por el PP recientemente paralizado como "aberración económica y de salud".