La ampliación del espectro de ondas cerebrales aplicables a la investigación policial abre interesantes perspectivas para el futuro. Por ejemplo, Valdizán ha estudiado en profundidad la P-600, de procesamiento léxico, que se genera cuando hay discordancias en el lenguaje (por ejemplo, al leer "el niño correr por el parque"). También la conocida como Variación de contingente negativo, que estudia el tiempo de reacción cuando se está esperando la aparición de un estímulo. Lo complejo es discurrir cómo estas ondas, ya conocidas, pueden aplicarse en criminología.