Los pacientes con dolor severo en Aragón no reblan en sus reclamaciones y, ante la «inacción» por parte de la consejería de Sanidad», están preparando una gran manifestación en Zaragoza para exigir en la calle la creación de unidades multidisciplinares en los hospitales que puedan atenderles. «No solo es dolor, sufrimos otras patologías derivadas y necesitamos que nos atienda un equipo sanitario de diferentes áreas. Con un servicio multidisciplinar se centrarían recursos y ahorraríamos visitas o citas», explica Rafa Díaz, portavoz de la Plataforma de Defensa de las Unidades del Dolor de Aragón.

Han intentado «por activa y por pasiva» contactar con la consejera Pilar Ventura y, estos días, le han vuelto a remitir otra carta (enviaron la primera en julio). «No tienen en cuenta el extremo sufrimiento por el que pasamos, especialmente con los brotes de dolor en esta época del año», apuntó Díaz.

En la comunidad hay unas 12.000 personas afectadas por dolor crónico severo, de las que 6.000 están en Zaragoza, 4.000 en Huesca y 2.000 en Teruel. Desde la plataforma apreciaron que el 80% de los afectados con dolor crónico, son mujeres mayores. Todos los pacientes y sus familiares quieren salir a la calle a mostrar su malestar, pero dado que sufren «patologías que les impiden desplazarse», están buscando apoyos entre colectivos sociales y sanitarios para configurar un gran grupo con el que concretar una fecha para la manifestación en Zaragoza.

Además de reclamar unidades multidisciplinares, también piden «más recursos» en los servicios existentes. Unidad de dolor, como tal, solo existe en Zaragoza, tanto en el Hospital Miguel Servet como en el Clínico. Sin embargo, "en Huesca y en Teruel te tratan a través del servicio de anestesia y hay problemas", dice Díaz.

HUESCA Y TERUEL

En este sentido, critican que en Teruel, tras la jubilación de la anestesista ha habido «problemas» para cubrir la baja, mientras que en Huesca «el servicio está desmantelado», apuntó el portavoz.

Por su parte, fuentes oficiales del Departamento de Sanidad de la DGA precisaron a este diario que, en el hospital Obispo Polanco, «en verano se suspendieron temporalmente las visitas, pero en septiembre se volvieron a retomar». En el caso de Huesca, añadieron que «se va a reforzar» el equipo que existe dedicado al tratamiento del dolor.