El recién elegido presidente de CHA, Joaquín Palacín, abordó ayer la crisis abierta en la formación aragonesista tras su designación en la Asambleya Nazional del pasado sábado, con el abandono definitivo de una histórica como Ángela Labordeta, apartada hace tiempo de la vida del partido, y otros cuatro afiliados. Palacín restó importancia a estos abandonos, asegurando que es «normal» que se produzcan ante un proceso de cambio. Aunque admitió que «duelen».

El presidente, de hecho, aseguró que en estos días desde su elección ha habido más altas que bajas de afiliados, aunque no pudo precisar el número de las mismas, y el secretario de organización en funciones, Miguel Jaime, tampoco, ya que no estuvo en la sede. Este sí que confirmó que no ha habido más bajas comunicadas desde anteayer, por lo que, de momento, se quedan en cinco.

Palacín, en una comparecencia ante los medios antes del inicio del pleno en las Cortes, afirmó que estas salidas no harán mella en el partido y que «la gente está contenta», como demostrarían estas nuevas afiliaciones. Rechazó valorar la marcha de Ángela Labordeta, más allá de calificarla como «absolutamente respetable», ya que «habría que preguntarle a ella» los motivos de su abandono definitivo.

Con un mensaje de optimismo, apostó por concentrarse en el Consello Nazional de la formación, que se celebrará el lunes y donde se debatirá el futuro inmediato de la población.

Allí tendrán oportunidad de debatir algún tipo de acercamiento a la corriente de Adrián Tello, el que fuera su rival por la presidencia de la formación el sábado, ya que Palacín aseguró que «en las próximas semanas» se definirá algún tipo de integración. Por el momento no la hubo en el Consello Nazional, pese a que la candidatura del alcalde de La Muela recibió un 38% de los votos.

INTEGRACIÓN

Esta nula representación fue esgrimida por algunos de los que se marcharon, aunque en realidad no pertenecían a este sector de CHA. Estos permanecen en el partido, e intentarán, en las próximas semanas, articular algún tipo de corriente interna para intentar que sus ideas de renovación calen en la organización, que para los desencantados está sufriendo demasiados abandonos en los últimos tiempos, más allá de estos cinco últimos.

Palacín tampoco quiso entrar en las declaraciones del actual director general de Carreteras, Bizén Fuster, que se refirió en la Asambleya a las juventudes del partido, Chobentú, como «peña gastronómica». El presidente no llegó a desdecir a Fuster pero sí se distanció de esta percepción y afirmó que «los jóvenes son el futuro» de la formación.

El director general de Transportes, Gregorio Briz, también apelaba estos días a la unidad en tiempos de «frustraciones vanidades malpagadas y rencores furibundos».