El pañuelo rojo clásico de las Fiestas del Ángel y la Vaquilla de Teruel luce ya en lo alto de la columna de plaza del Torico, rodeando el cuello del astado, después de un acto como siempre multitudinario que este año se ha celebrado por primera vez con el sello de la declaración de Fiesta de Interés Turístico Regional.

Los encargados de encaramarse hasta lo alto de la columna, subidos en sus compañeros de la peña "Los que faltaban", han sido Chencho Muñoz y José Antonio Sánchez, que han celebrado así el 50 aniversario de la peña.

Interpeñas ha aceptado que corra el turno, ya que le tocaba a otra peña cumplir con el ritual, y así que "Los que faltaban" puedan celebrar su quincuagésimo aniversario por todo lo alto.

La Vaquilla tiene además otros rituales puramente festivos, aunque se cuele alguno más tradicional, como la Salve al Ángel Custodio con la que empieza siempre este sábado de La Vaquilla y que se ha celebrado a las 11.20 horas de la mañana.

Después, Lázaro Vicente ha sido nombrado Vaquillero del Año y justo al mediodía, se producía la subasta de palcos de la plaza de toros para la merienda de mañana domingo.

Por la tarde, a las cuatro y media, la alcaldesa de la ciudad ha hecho un llamamiento a la fiesta desde el balcón del Ayuntamiento y ha dado la señal con el toque del Campanico del Ángel.

Desde allí han partido los encargados de llevar hasta la plaza el pañuelo que ya luce el Torico, después de la explosión festiva que se desata cuando los dos peñistas cumplen con la tradición.

Ellos han sido protagonistas hoy del acto más espectacular de estos días, y el más multitudinario de La Vaquilla, que se celebra durante el fin de semana, después de que los días anteriores los actos se enmarquen en las Fiestas del Ángel.

Este año se han celebrado por primera vez como Fiesta de Interés Turístico Regional, algo que, en palabras del concejal de Fiestas, Javier Domingo, obliga a trabajar para "mantener la calidad" de la fiesta y para que "dentro de cinco años se pueda optar a conseguir la denominación de Fiesta de Interés Turístico Nacional", ha explicado a Efe.

El trabajo se centra especialmente, según destaca, en mejorar cada año la limpieza en una ciudad que vive la fiesta en la calle, con la música de charangas, orquestas y el protagonismo de los toros, en el coso y por las calles, el próximo lunes, con el toro ensogado.

Y es que tras la semana de actos de las Fiesta del Ángel, organizados o coordinados por el Ayuntamiento de Teruel, toda la música la ofrecen ahora la veintena de peñas que llegan a todos los rincones del centro histórico.

"Esto está distinguiendo a La Vaquilla", resalta la alcaldesa de la ciudad, Emma Buj. Y agrega: "la calidad de las actuaciones musicales y que se ofrecen de manera gratuita".

La celebración de La Vaquilla es un ejemplo de fiesta alegre en la calle, pero la falta de civismo algunos años ha obligado a las autoridades a corregir la fiesta, ante las críticas de quienes consideraban que la ciudad se convertía en un "gran macrobotellón".

Medidas que van desde la limitación del horario de la música de las orquestas o discomóviles en la calle hasta prohibir la entrada de vidrio en la plaza del Torico para la puesta del pañuelo o aumentar el número de urinarios en las calles.

Así, los trabajos de limpieza se intensifican cada año, desde el primer momento, para evitar la acumulación de vasos en las calles y plazas, y también las peñas contribuyen a mejorar la limpieza de las zonas que tienen asignadas.

Además, el año pasado se habilitó un espacio en la ciudad como zona de acampada para evitar que muchos ocupen los parques, los jardines o los paseos del río.

A ello se suma que el Consistorio pone en marcha estos días actividades de sensiblilización para la limpieza y el cuidado del mobiliario, para disminuir el consumo de alcohol y este año, por primera vez, contra las agresiones sexistas.