El pacto alcanzado entre el PSOE, Ciudadanos y CHA para elevar el límite exento en el impuesto de Sucesiones a 500.000 euros entre padres, hijos, cónyuges y parejas de hecho junto a otras cláusulas sociales podría incorporar un nuevo socio si este acuerdo se aplica este mismo año. Ese nuevo socio sería el PAR, uno de los grupos más beligerantes con el Gobierno por este impuesto y cuya portavoz en Hacienda, Elena Allué, ha protagonizado alguna de las intervenciones más duras contra el consejero de Hacienda, Fernando Gimeno.

Sin embargo, tras conocer parte del acuerdo, que hoy se convertirá en un proyecto de ley tras su aprobación en un consejo de Gobierno extraordinario, Allué señaló que su partido está «para buscar soluciones y no poner palos en las ruedas», por lo que apoyaría este acuerdo siempre que se aplicara este año y no el próximo, con convocatoria electoral. Además, el PAR no renuncia a que en el 2019 este límite de exención se amplíe hasta el millón de euros y en el 2020 se bonifiquen al 99 % todas las herencias entre familiares directos.

Allué se felicitó porque el debate se vaya ganando gracias a la presión política y social, pero lamentó que Lambán «recule» por «tacticismo electoral», quedando en evidencia el «fracaso absoluto» de su política fiscal. Para la diputada aragonesista, el acuerdo sigue siendo de mínimos, y sigue poniendo a Aragón entre las comunidades donde más se paga por este controvertido tributo.

Allué también evidenció la contradicción de Lambán al considerar «inconstitucional» hace 15 días la fiducia y ahora se incluya en el acuerdo a petición de CHA, y que el PAR también ha reclamado. Allué lamentó que los aragoneses «lleven tres años sometidos a una elevadísima carga fiscal», motivo principal por el que no descarta apoyar este proyecto de ley que ahora entrará en las Cortes para su tramitación y la fase de enmiendas.

No se antoja sencillo que este proyecto salga adelante, ya falta por ver cuál será la posición del PP y de Podemos. Y ambas parecen claras contra el acuerdo, que incluso CHA podría rechazar si durante la tramitación se alteran algunos de los puntos acordados.

Por tanto, este proyecto de ley llega sin la mayoría necesaria para salir adelante, puesto que los votos de PP, Podemos y de IU sumarían 36, por encima de la mayoría. De momento, el PSOE solo tiene amarrados sus 18 votos junto a los 5 de Ciudadanos y, en principio, los dos de CHA. Una cantidad muy insuficiente para sacar adelante esta ley, con la que se pretende rebajar en parte el agravio que supone que los aragoneses sean los que más pagan por este impuesto.