El PAR presentó ayer, por segunda vez, una solicitud formal para restaurar la estatua dedicada al jotero Pedro Nadal y Auré, conocida como El Royo del Rabal, situada en el parque del mismo nombre, y que, según la formación, «ha sido víctima de numerosos daños y y actos vandálicos, hasta el punto de que su estado es verdaderamente lamentable». Además, exigió la correcta conservación de todas las esculturas de la vía pública.

El pasado mes de enero el Partido Aragonés ya demandó al consistorio la restauración de dicha escultura. El servicio de Cultura reconoció su deterioro, pero pospuso su arreglo al «carecer de un técnico restaurador» y también por «las limitaciones económicas y materiales existentes». Sergio Larraga, presidente del comité municipal del partido, alegó que «no puede ser que no haya personal», y añadió que la actitud del equipo de gobierno muestra una «falta de sensibilidad absoluta hacia nuestras raíces culturales, y más concretamente al sector del folclore aragonés en la persona del insigne jotero».

El ayuntamiento anunció ayer que «ya se ha convocado la plaza de técnico restaurador» y que están «en proceso de contratación tras la jubilación del anterior trabajador».

Junto al Royo del Rabal, Larraga hizo referencia a otros monumentos como el de El equilibrista, ubicado en la Glorieta de Sarajevo, al que cortaron los pies, o El carro del Agua, construído bajo el puente de La Almozara con motivo de la Expo en el 2008, y que fue arrancado en un acto vandálico.

Las estatuas del Parque Grande también muestran su deterioro. Cerca de la cascada se erige el busto de Joaquín Dicenta, periodista y escritor de Calatayud, que según explicó Larraga «está sucio, estropeado y necesita una restauración urgente». Desde el PAR, también criticaron las pintadas y los grafitis a los elementos arquitectónicos de la plaza Europa, que se deben a «la falta de cuidado y dejadez».

La figura en honor a Basilio Paraíso, el monumento el dedicado a la memoria de Paco Martínez Soria o la escultura de La madre, de Ángel Orensanz, que está decapitada, son otros de los ejemplos con los que el PAR demanda al ayuntamiento el prometido plan de restauración y conservación de las esculturas de la vía pública.