La portavoz de Hacienda del PAR, Elena Allué, instó ayer al presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, a «forzar» el diálogo y a que no se niegue a «dar la palabra» a otros grupos que no sean los de la izquierda para lograr aprobar los presupuestos de la comunidad para este 2019.

Se lograría así, según dijo, evitar los problemas que conlleva la prórroga de las cuentas del 2018, que supone, según sus datos, el bloqueo de las tramitaciones anticipadas, la paralización de las subvenciones a entidades sociales o económicas o de la subida del Ingreso Aragonés de Inserción (IAI) o la imposibilidad de aplicar la subida salarial a los funcionarios.

Para Allué, los partidos de izquierda han demostrado hasta la fecha una «absoluta falta de respeto y de preocupación» por los problemas de los aragoneses y los zaragozanos, en tanto en cuanto ninguna de las dos principales instituciones de la comunidad (la DGA y el Ayuntamiento de Zaragoza) han aprobado sus cuentas para este año. «Estos partidos están más entretenidos en rascar votos o en quitárselos los unos a los otros y en pactar sillones que en resolver los problemas de los ciudadanos», dijo.

Por eso consideró que Lambán «no puede permitirse el lujo de negarle la palabra a otros para poder llegar a un consenso».