El Grupo del PAR en las Cortes ha registrado una moción en la que exige al Gobierno que elabore, en el plazo de un mes, un informe detallado del grado de cumplimiento de los proyectos, objetivos y promesas planteados a principio de Legislatura en los pactos de investidura y el cronograma a seguir.
La diputada aragonesista María Herrero ha presentado en rueda de prensa esta iniciativa en la que se pide al ejecutivo que ponga "negro sobre blanco" y explique el desarrollo de estos proyectos y en el que se reconozca cuáles de ellos no se van a poder llevar a cabo, quizá por haber cometido "cálculos erróneos" acerca de sus posibilidades.
Según Herrero, hay un "sinfín" de proyectos que se prometieron al inicio de la legislatura por el presidente, Javier Lambán, y por sus consejeros, que más de dos años después ni siquiera han comenzado a poner en marcha.
Ha recordado que Lambán llegó a acuerdos con tres fuerzas políticas para ser investido: con Podemos firmó un decálogo de medidas, con CHA un documento con 50 puntos para conformar además un Gobierno de coalición, y con IU una propuesta con 35 proyectos.
De ellos, ni siquiera 50 han comenzado a ponerse en marcha, ha explicado, y aunque el PAR con algunos de ellos no está de acuerdo, lo que se pone en evidencia es que "engañan a la ciudadanía" porque prometieron cosas "que luego no están cumpliendo".
Entre ellas ha detallado la aprobación del pacto educativo; dedicar a educación el 5 por ciento del PIB; presentar leyes como la de juventud, de reforma electoral o contra la violencia machista; promulgar un pacto social y político para lograr una nueva estructura productiva; medidas de apoyo a pymes y autónomos; incrementar el apoyo a los discapacitados; conceder un "trato preferente" a la agricultura o a la ganadería, o crear una oficina antifraude.
Proyectos que a menos de dos años para la conclusión del mandato, deberían estar "en su máximo apogeo".
En su iniciativa, el PAR también pide a las Cortes de Aragón que manifiesten su malestar por los "reiterados cumplimientos" de los mandatos que emanan del Parlamento.
Para Herrero, que el Gobierno diga "a todo que sí" en las Cortes y que luego "no cumpla nada" hace "bastante daño al Parlamento y a la política en general".
