El presidente del Partido Aragonés (PAR) y portavoz de este grupo en las Cortes de Aragón, Arturo Aliaga, manifestó ayer su «gran preocupación» tras el «absoluto fracaso» de la reunión mantenida el miércoles entre la ministra de Transición Energética, Teresa Ribera, y el presidentes de Aragón, Javier Lambán, para hablar sobre el cierre de la térmica de Andorra. En su opinión, fue un encuentro «de puro trámite» y el discurso de Ribera «no es convincente ni ilusionante, ni aporta luz».

El líder aragonesista defendió la continuidad de la térmica hasta que existan proyectos dotados que impidan el «desastre económico y social» que supondría la «operación de cierre tal como está planteada actualmente».

Por su parte, IU criticó que Ribera «fíe» el futuro de las comarcas mineras a la iniciativa privada y «olvide el papel de garante que tiene que tener el Estado».