El Ayuntamiento de Zaragoza lleva tres meses luchando contra el reloj para evitar que el centro termal del Parque del Agua Luis Buñuel cierre sus puertas apenas tres años después de su apertura. Este es el enésimo obstáculo que se encuentra en el camino este negocio, o más bien sus gestores, Geexpark, que han desistido en el intento y el pasado mes de febrero anunció su voluntad de renunciar a él por las cuantiosas pérdidas y deudas que les ha generado. Al complejo que incluía spa y gimnasio y que cuenta con 2.500 usuarios, pero también al campo de golf contiguo, que abrió sus puertas en el 2008 y que ta,bién depende de esta firma. Pero el consistorio busca un cambio de manos rápido para evitar que se vayan al paro los 40 trabajadores que dependen de que ambos negocios sigan funcionando.

Los dueños de este negocio se negaron a responder a las preguntas de este diario, aunque desde el consistorio admitieron que es cierto que se está buscando una solución al enorme problema que esta liquidación de la concesión representaría. Y sería el segundo en poco tiempo tras la renuncia de Murillo Rafting al canal de aguas bravas. Ahora ya hay otra concesionaria, la misma fórmula que se pretende dar al centro termal.

Mientras, desde el PP municipal, el concejal Julio Calvo, lamentó que se vaya a dejar de percibir los 215.000 euros de canon de "otro negocio vinculado a la gestión de Jerónimo Blasco, quien sigue viviendo en una realidad política y económica paralela" y al que acusó de ocultar un "nuevo fracaso".