El nuevo parque de Bomberos de Casetas, que prestará servicio a la zona oeste de la ciudad y a sus barrios rurales, entrará en funcionamiento en el primer trimestre del 2020 y estará operativo las 24 horas del día, algo que será posible con la ampliación de la plantilla de agentes municipales prevista para los próximos meses.

El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, anunció que esta es la fecha definitiva, pues acumula un retraso de cuatro años, durante su visita a las instalaciones junto al concejal delegado de Bomberos, Alfonso Mendonza. El nuevo edificio tiene 1.000 metros cuadrados y se ubicada en una parcela de 8.000 metros cuadrados junto a las piscinas municipales de Casetas y con salida directa a la carretera.

Este proyecto ha supuesto un coste de 1,4 millones de euros para el Ayuntamiento de Zaragoza y la Diputación Provincial, institución que ha asumido prácticamente toda la inversión.

Por ello, este nuevo parque de bomberos, además de atender a la zona oeste de la capital aragonesa y a los barrios rurales de Casetas, Monzalbarba, Garrapinillos o Alfocea, también prestará servicio a los municipios vecinos de Utebo, Torres de Berrellén o Sobradiel.

Las obras del edificio han concluido a falta de terminar la conexión definitiva a la red eléctrica y la urbanización de una zona de la campa exterior.

Para su apertura, prevista para el primer trimestre del próximo año, falta acometer las tareas de amueblamiento de las diferentes dependencias del interior, entre ellas la cocina, los dormitorios o el gimnasio. Según Azcón, esta obra acumula un gran retraso porque el anterior Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) paralizó la licitación y, tras rehusar hacer valoraciones sobre esa decisión, dijo que había que «mirar hacia delante» y acelerar los concursos que quedan por salir a licitación para que el parque funcione cuanto antes. Inicialmente este parque solo contará con una dotación de bomberos.