--¿Cuándo se inauguró el Pago Pago?

--Se abrió el 11 de febrero de 1971. Y yo estaba allí.

--¿Quién era el dueño?

--Manuel Ramírez. Era un ingeniero agrónomo canario, que llegó a Zaragoza. Estaba relacionado con riegos y tal y conoció a una zaragozana, la hija del director del Corona de Aragón, y se casaron. Y montó el Pago Pago de Doctor Cerrada.

--Es raro que instalara este bar tan exótico.

--Hombre, estaba relacionado con militares de la Base que habían estado en las Samoas Occidentales. Por eso.

--Aquello tuvo éxito.

--¡Tremendo! La inauguración duró seis meses y tuvimos seguridad en la puerta. Todo el mundo quería conocerlo. Ten en cuenta que en aquella época la hostelería en Zaragoza era muy clásica.

--Iban sobre todo parejas.

--Y gente mayor. La media de edad era alta.

--Yo creía que iban jovencitos a darse el lote...

--El lote se lo daban en todas partes, pero no era el clásico reservado como el Trajinero, el Cancela, el Tahona... Aquí venían parejas más adultas, ten en cuenta que la consumición no era barata.

--¿Usted cuándo entró?

--Antes de abrir la puerta. Inauguré como camarero. Antes había estado en el Savoy, en la cafetería Roma, en la venta de los Caballos, que es donde empecé...

---Usted podría casi escribir un libro del Pago Pago.

--¡Hombre! De lo que he visto y escuchado. La mayoría de los que venían entonces, ahora son don. Los dirigentes de este cotarro actual.

--¿Y le saludan cuando le ven?

--Claro, claro. Los nietos de mis primeros clientes han sido mis clientes. Catedráticos, empresarios, jóvenes que hacían sus escarceos en política... Incluso se hicieron algunos encuentros políticos importantes porque estamos hablando de los años 70. En la parte de abajo, instalamos en ciertos momentos una cava de música en directo.

--¿Cuándo se hizo cargo usted?

--En junio de 1980 se lo compro al dueño. Lo he tenido 33 años.

--¿Por qué lo cierra?

--Porque me he jubilado. Está cerrado el bar y la actividad.

--Creo que tiene muchos seguidores en Facebook...

--Los tengo y no paran de mandarme saludos. Sobre todo gente que venía asiduamente. A través de internet pienso seguir teniendo vinculación con los seguidores, especialmente para darles información de recetas de cócteles que se servían allí.