Paseíllo, vuelta y pasada... Las tendencias de moda flamenca triunfaron ayer en el Gran Hotel de Zaragoza. Fue en el segundo desfile organizado por la Escuela de Mamá (de Mamen Martínez) un proyecto que empezó como academia en la capital del Ebro y que, después, sumó también su propia tienda de moda flamenca y complementos. Como ocurrió el año pasado, llenaron las 200 localidades del salón principal del hotel. Y eso que, esta vez, se cobraba entrada (5 euros, de los que se detraerán gastos y se entregará el resto al Banco de Alimentos).

Sobre la pasarela, alumnas de la academia convertidas en modelos por un día y echándole arte a la tarde. Y también colecciones recién llegadas del prestigisio Salón Internacional de Moda Flamenca (SIMOF), que se celebró hace unos días. Era el caso de Olivares y Roal, que compartieron las tablas con firmas como Tomar Artesanía, Quema y los espectaculares Tocados di Testa (de Elena Lamata, made in Aragón. Organizaban, en el backstage, Mamen Martínez, su equipo, y Josema Hernández de la Torre. Entre y pase y pase, largo, corto y volante, tocaba tomar nota. Admirar colecciones para irse de feria (y, en algunos casos, también de boda o de fiesta). Hablar de tendencias, coloridas, llenas de estampados y flores. Será invierno en la calle. Pero, en la pasarela, ¡se hizo la primavera!