Los implicados en una reyerta entre temporeros suramericanos y portugueses registrada el 11 de septiembre del 2001 en Cariñena aceptaron ayer una sentencia de conformidad para evitar condenas de cárcel. El juicio por lesiones se celebró ayer en el Juzgado de lo Penal número 4 de Zaragoza, que impondrá penas de multa a todos los acusados.
Los hechos juzgados ocurrieron en una finca de la localidad durante la vendimia de ese año, cuando unas trabajadoras suramericanas discutieron con otros temporeros portugueses, a los que acusaban de realizar el mínimo esfuerzo y cargar las labores sobre ellas.
El propietario de la finca intervino para despedir a los últimos, aunque les permitió dormir esa noche en el lugar para que se marcharan al día siguiente.
Durante la madrugada, los despedidos atacaron a las empleadas, a las que culpaban de su marcha y azuzaron un perro de raza pit bull contra ellas. En la reyerta intervinieron otros temporeros y varios de ellos resultaron con lesiones de diversa importancia que requirieron tratamiento médico. Dos personas sufrieron también mordeduras por parte del animal.
Inicialmente, el ministerio fiscal solicitaba penas de hasta un año de prisión contra tres imputados, a los que acusaba de delitos y faltas de lesiones. No obstante, antes de comenzar el juicio, las partes implicadas alcanzaron un acuerdo para aceptar penas multa de tres meses, con una cuota diaria de dos euros para los delitos y de dos meses con la misma cuota para las faltas.
