"La piel es una prenda ecológica y biodegradable, que cumple rigurosos controles y es compatible con el desarrollo sostenible y el medio ambiente". Así lo aseguró ayer la presidenta del Gremio de Peleteros de Aragón, María José Rodríguez, al hacer balance de la última campaña del sector. Dicha acción pretendía "acercar a la opinión" (mediante anuncios en prensa y folletos, editados con el apoyo de la DGA) a la realidad de esta industria que ha sufrido "el desprestigio de campañas de demagogia y desinformación".

Rodríguez recalcó la importancia de este sector, que en España factura 500 millones de euros (un 4% en Aragón) y emplea a 50.000 trabajadores. "No hay nada más ecológico que la piel", añadió la presidenta, que comparó estas prendas con las sintéticas, "que sí son perjudiciales para el medio ambiente por estar fabricadas con derivados del petróleo".

Por su parte, el presidente de la Organización Empresarial Española de la Peletería, Martín Martínez, resaltó que la peletería ha llegado a un público masivo gracias a la moda, el diseño y la calidad, después de haber sufrido un descenso del 60% de sus ventas a consecuencia de las críticas de "colectivos minoritarios".

Añadió que la práctica totalidad de las prendas proviene de animales de granja, "criados como las vacas o las gallinas, para consumo" y sólo entran en España "con una estricta carta de origen". Asimismo, hizo referencia a la próxima introducción de un sistema de etiquetado, que incluirá el nombre científico del animal, para ofrecer mayores garantías al consumidor. Martínez criticó, por último, la presencia de vendedores ambulantes de este tipo de prendas en ciudades como Zaragoza y recomendó a los consumidores de "abstenerse de supuestas gangas sin garantía".