Nuevo cambio de propiedad en energías renovables instaladas en Aragón, que afecta a una de mayores inversiones desplegadas en el último año. El grupo ACS ha alcanzado un acuerdo definitivo con la petrolera portuguesa Galp para la venta de su participación en proyectos de energía fotovoltaica en España, una operación en las que se incluyen las plantas solares que la compañía presidida por Florentino Pérez ha levantado en las localidades aragonesas de Escatrón, Chiprana y Samper de Calanda, a media camino entre las provincias de Teruel y Zaragoza.

Se trata del proyecto solar puesto en marcha en Europa con una potencia conjunta de 850 megavatios (MW) repartidos en 17 plantas que ocupan un total de 3.173 hectáreas de superficie. La mayor parte de estas instalaciones entraron en servicio a finales del pasado año y cumplieron así con el plazo marcado por la tercera subasta renovable del Gobierno, régimen en el fueron identificados estos activos.

Los proyectos iniciaron su tramitación bajo la batuta del grupo Ignis, que posteriormente los traspasó a Cobra, filial industrial de ACS, cuando esta se asignó un paquete de 1.550 megavatios en la citada puja verde, celebrada en el 2017. Las obras de contenciones de estas plantas fotovoltaicas se han desarrollado en un tiempo récord: apenas un año. Eso si, los trabajos han estado rodeados de cierta polémicas por los retrasos en el pago denunciados por varios proveedores.

La operación, desarrollada a través de otra filial (ACS Servicios, Comunicaciones y Energía), está sujeto a la ratificación por el órgano de gobierno de la compañía antes del fin de este mes y a las autorizaciones habituales en este tipo de contratos. La transacción le generará unos beneficios de 330 millones de euros.

Los proyectos fotovoltaicos incluidos, todo en España, son tanto los actualmente en funcionamiento como los que se esperan poner en funcionamiento hasta el 2023, con una potencia total instalada de unos 2.930 MW, según informó recientemente ACS a través de un hecho relevante a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Con esta adquisición, Galp se hace con una capacidad ya instalada de 900 MW y proyectos en desarrollo o en fase de autorización que le permitirán alcanzar en 2023 una potencia de generación instalada de 2,9 gigavatios (GW).

El cierre de la operación está previsto que se produzca en el segundo semestre del 2020.