No prometo ni una gota de agua a Murcia hasta que no se ponga orden allí. Y si finalmente tuviera que haber alguna aportación a la cuenca del Segura, no será del Ebro". Así de rotunda se mostró ayer la responsable federal de Medio Ambiente del PSOE al explicar la tesis que plasmarán los socialistas en su programa para las elecciones generales del próximo mes de marzo. Un reforzamiento del acueducto Tajo-Segura sería una alternativa del partido, pero sólo si fallan otras actuaciones previas en la cuenca receptora.

El PSOE ha plasmado las bases de su política hidráulica en doce puntos recogidos en el borrador del que será su programa electoral. En ese texto se rechaza el macrotrasvase del Ebro y se considera que sólo la cuenca del Segura sería susceptible de recibir aportes "de otras cuencas" si no fuera suficiente con medidas alternativas (desalar, modernizar y reutilizar).

En declaraciones a este diario, Cristina Narbona defendió la necesidad de "salir de la idea de que la política del agua se basa en los trasvases". Y añadió: "No digo que no haya que hacer ninguna conducción, pero no es igual mover 1.050 hectómetros cúbicos que 50".

A su juicio, hay que cambiar los planteamientos, realizar un "diagnóstico efectivo" de la situación de la cuenca del Segura, modificar los usos del agua en esa zona, reutilizar, desalar, modernizar sistemas para hacerlos eficientes y terminar "con los desvíos de agua" que perjudican al agricultor y fomentan "operaciones especulativas de suelo".

Sólo así se podría saber realmente si la cuenca necesita agua y si hace falta "una transferencia entre cuencas complementaria y marginal". Para ese caso, el PSOE ha estudiado "muchas alternativas", como la de reforzar el trasvase Tajo-Segura, pero Narbona no quiso concretarlas. "No queremos anticipar nada si no hay un consenso previo" Sí aclaró que la opción citada no supondría "sacarle más agua al Tajo".

Narbona fue muy crítica con la macrocesión del Ebro, que rechazó reiteradamente. El proyecto del PP, garantizó, es "impresentable desde el punto de vista de la racionalidad" y "un disparate" tanto económico como ambiental. La dirigente socialista resumió: "La alternativa al trasvase no es otro trasvase, sino otra política".

LOS SOCIALISTAS EN ARAGON El presidente aragonés, Marcelino Iglesias, se mostró convencido de que la victoria del PSOE en las próximas elecciones generales supondría "una garantía rotunda, segura y absoluta" de que no se hará el trasvase del Ebro.

Iglesias recalcó que su partido defiende una política hidráulica "que no tiene nada que ver con los trasvases, porque es algo que ya está superado. Por eso, no aparecen en el programa electoral del PSOE". El también secretario general del PSOE aragonés valoró la evolución experimentada en los últimos años por su partido, que ha pasado de respaldar las cesiones entre cuentas a defender otras fórmulas alternativas "mucho más económicas y más rápidas" que la que plantea el Gobierno del PP.

OTRAS REACCIONES Mientras, en Murcia los populares cargaron contra los socialistas de esa comunidad, a los que pidieron que no hagan un "uso electoral" del agua. Y estos últimos dijeron que realimentar el Tajo-Segura es "más viable y realista" y atacaron al presidente murciano, Ramón Luis Valcárcel, del PP, por ser "incapaz" de lograr la llegada de agua del Ebro a la zona, informó Europa Press .