Las piscinas municipales de Zaragoza han registrado 899.300 usos durante los meses de junio, julio y agosto. Un 3,65% menos que el año pasado, cuando se alcanzaron los 937.369 accesos y eso que durante las olas de calor las entradas fueron gratuitas, una medida impulsada por el nuevo equipo de Gobierno.

Uno de los motivos de esta caída puede deberse a que las instalaciones de Gran Vía, las que más volumen de usuarios registran cada verano, permanecen cerradas. El resto de centros, tanto en los distritos como en los barrios rurales, han mejorado sus cifras.

La temporada de piscinas de verano se prolonga durante esta semana adicional en tres centros deportivos municipales: La Granja, Actur y Delicias.

Como otros años, el mes de julio ha vuelto a ser el más concurrido, con 359.871 usos, un 18% menos que en el 2018. Este descenso amortiguó el incremento del aforo registrado en junio, que fue de 277.271 usos, un 32% más que el año anterior. En agosto, el balance ha sido de 262.158 accesos, prácticamente los mismos que en 2018 (262.166), según los datos facilitados por la concejalía de Deportes.

Por instalaciones, todas han subido en número de usos. La más demandada ha vuelto a ser la del La Granja que, con 112.138 accesos, es, además, la que ha experimentado un mayor crecimiento porcentual, que son 12,65% más que el año pasado.

En segundo lugar se encuentra el centro deportivo del Actur, con 79.824 usos, 9% más, seguido del Alberto Maestro con 73.407 usos, 8,28% más, y las piscinas de Delicias con 73.270, 8,26% más.

El cierre del Gran Vía se ha notado también en las piscinas más cercanas. El público ha crecido en un 7,66% en las instalaciones de Perico Fernández con 67.908 usos, un 7,47% en Ciudad Jardín, que ha tenido 66.254 entradas y un 5,28% en el Palacio de los Deportes con 46.814.

A pesar de que los registros son peores que los del año pasado, se trata de una de las mejores cifras desde el 2012, señalaron desde Deportes.