El consejero de Hacienda del Gobierno de Aragón, Javier Campoy, pasa hoy una dura reválida. Será en el Consejo de Política Fiscal y Financiera que se celebra esta tarde en Madrid y que analizará, y en caso afirmativo aprobará, los planes de ajuste de las seis comunidades autónomas que incumplieron el objetivo de déficit el año pasado. Junto al consejero aragonés, será día de examen para el responsable de Hacienda valenciano, catalán, manchego, castellano-leonés y navarro.

Todas estas comunidades sobrepasaron el techo permitido y deben presentar hoy los recortes adicionales que deben aplicar para no sobrepasar el tope estipulado, que se cifró en el 1,3% y, en el caso de la comunidad autónoma, fue del 2,06%. Hasta última hora de ayer, técnicos de la consejería seguían negociando con los del ministerio algunos flecos para que este documento --que todavía no se ha hecho público por ser provisional y no haber sido sometido a votación-- salga adelante y no se posponga a finales de agosto o de septiembre con nuevas medidas extraordinarias que, de momento, no contempla el departamento del Ejecutivo autonómico.

De hecho, el ajuste ronda los 200 millones de euros y desde el Gobierno aragonés insisten en que no tendrá incidencia en los servicios públicos fundamentales. Como ya se ha dicho, habrá retenciones de crédito de 148 millones de euros, partidas que se dejarán de ejecutar en servicios no esenciales, que se contemplarán con medidas de ahorro, un mayor control de gasto y un incremento en la partida de ingresos por venta de patrimonio.

Esta misma semana, un informe de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) señalaba que las seis comunidades que no cumplieron con el objetivo de déficit en 2013 deberán adoptar más medidas económicas para lograr la estabilidad presupuestaria este año.