La directora del Instituto Aragonés de la Mujer (IAM), Natalia Salvo, presentó ayer en las Cortes de Aragón el Plan de Estratégico para la Igualdad que incluye más de cien medidas.

Salvo aseguró que el Gobierno de Aragón sitúa esta equidad como «la piedra angular de las políticas públicas a través de una batería de acciones y un incremento presupuestario».

Este proyecto se divide en cuatro ejes e incluye 116 actuaciones concretas para fomentar la igualdad entre sexos, según explicó la directura del Instituto Aragonés de la Mujer.

Se trata del primer proyecto de estas características en la comunidad. Salvo subrayó que esta normativa, que dimana de la Ley de Igualdad, en la actualidad está siendo sometido a un proceso de participación ciudadana que hará que el documento sea «más completo y cuente con un mayor consenso».

Salvo también hizo referencias a las dificultades del medio rural en este ámbito y expresó la necesidad de que el plan contemple medidas concretas para aquellas mujeres que «sufren una doble discriminación, de género y territorial». «Las entidades y federaciones del medio rural están trabajando de forma activa en el proceso de participación», destacó la directora

DIFERENCIAS / La diputada del PP, Ana Marín, reprochó este programa y destacó que el Gobierno de España ha logrado el Pacto de Estado contra la Violencia de Género y criticó que el texto presentado es «una mera declaración de intenciones» en el que no hay medidas «tangibles».

La socialista Pilimar Zamora resaltó que el Ejecutivo autonómico ha aprobado más de treinta convenios en materia de igualdad para el territorio, «con una cuantía que ha aumentado un 79% y ha puesto en valor que 174 actores hayan participado en este documento, lo que es el mejor aval», según Zamora.

Desde Podemos, la diputada Amparo Bella recriminó que «estas medidas no pueden llevarse a cabo sin dotación presupuestaria», por lo que este plan y esta ley «flaquean» y recordó que «los casi 50.000 empleados públicos llevan diez años esperando un Plan de Igualdad».

MÁS REACCIONES// Desde el partido regionalista, Elena Allué afirmó que la igualdad real «no existe». La diputada recordó que solo un 3 % de los cargos de dirección están ocupados por mujeres, una realidad que considera «desoladora» y que se «incrementa en el medio rural». Allué cuestionó a Salvo sobre el peso de la mujer en los pueblos en este plan estratégico.

Desiré Pescador, diputada de Ciudadanos, lamentó que el cambio social queda «lejos» de conseguirse de una forma real.

Por último, Patricia Luquin, del Grupo Parlamento Mixto y portavoz de Izquierda Unida, afirmó que «en la sociedad hay una desigualdad estructural» y que mientras las mujeres no ocupen los espacios de poder «no podrán protagonizar la agenda política».