El plan General de Pesca en Aragón para el 2019 se propone dotar de mayor protección a la trucha común de manera que los ejemplares pescados en los cotos sociales de captura y suelta (antes declarados como cotos sociales en régimen extractivo) se deberán soltar vivas y con el menor daño posible.

Este cambio de modalidad supone además el aumento de la temporada de pesca en aguas trucheras, ya que, si el periodo hábil de la pesca extractiva de la trucha termina el 30 de agosto, en la modalidad en captura y suelta, que ahora resulta obligatoria en todos los cotos sociales de pesca, acabará el 15 de octubre, un mes y medio más tarde.

Esta nueva medida busca desestacionalizar el turismo fluvial veraniego y potenciar el recurso de la pesca de la trucha para aumentar su impacto sobre las economías ribereñas.

Asimismo, también se declaran aguas habitadas por la trucha a los embalses de La Paridera del Prado y del Prado, ambos en Lituénigo; el embalse de Valdemediano, en Litago, y el embalse de las Landas, en Tarazona. Por otro lado, el nuevo Plan de Pesca recoge novedades como el permiso para la pesca de especies exóticas en la modalidad de captura y suelta voluntaria en determinados lugares.