Las trabajadoras de Linceci, tanto las que desempeñaban labores comerciales como las que vendían productos a través del call center del barrio del Actur, se enfrentan a un limbo laboral. Las empleadas, algo más de 40 en total y cuya edad media supera los 45 años, no han recibido una carta de despido tras conocerse la trama diseñada para recaudar fondos para el cáncer infantil. Por tanto, no pueden recibir indemnización alguna ni finiquito, ni solicitar la prestación por desempleo, algo a lo que tienen derecho cuando una empresa prescinde de alguno de sus trabajadores. De ahí que para muchas la situación sea más que desconcertante.

Fuentes jurídicas y sindicales consultadas por este diario apuntaron ayer que la situación presenta dos vertientes: la laboral y la civil. En la primera de ellas, lo aconsejable es que la plantilla presente una demanda por el despido. «Los Servicios Públicos de Empleo deben acreditar que esa persona no está trabajando por causas ajenas a su voluntad», señalaron las citadas fuentes. Por tanto, lo primero es activar la vía judicial. Dado que la empresa no ha comunicado el despido de forma expresa, deberá ser el empleado el que solicite los salarios pendientes por recibir y la indemnización por despido. En el caso de que se declare insolvente la empresa, se deberá acudir al Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) para que este le abone los impagos, aunque existen unos límites como que, en concepto salarial, no se podrá superar el doble del SMI y solo se pagará como mucho 120 días.

Otra de las vías es la civil, en el caso de que las trabajadoras quieran reclamar daños y perjuicios por la situación creada. No obstante, lo aconsejable es acudir a profesionales en el caso de que se decida dar este paso para ser asesorados.

Por lo pronto, a las trabajadoras se les adeuda el mes de mayo. Además, se da la circunstancia de que su actual situación les priva de buscar otro trabajo, ya que si lo hicieran perderían todos los derechos adquiridos durante el tiempo que han estado contratadas. Hasta que no se aclare la situación tienen la obligación de presentarse en su puesto de trabajo, si bien ya permanece cerrado.