"No encuentro justificación para el aumento del coste de las obras, que desde la adjudicación han sufrido un doble proceso de reducción de la calidad y aumentos sistemáticos de precios que han llevado al disparatado resultado económico final". Esa es la demoledora conclusión del informe que el perito judicial del caso pagarés, el arquitecto Teodoro Ríos, ha aportado al Juzgado de Instrucción número 5 de Zaragoza, cuyo titular, Francisco Picazo, le encargó que valorara las naves de Autocity, obra que ejecutó Codesport para Plaza.

El juez investiga la posible existencia de delitos en esa obra en una causa en la que están imputados el dueño de Codesport, Agapito Iglesias; el exconsejero delegado de Plaza, Carlos Escó; el exgerente de la empresa pública, Ricardo García Becerril, y su director técnico, Miguel Ángel Pérez. El juez les ha impuesto una fianza de responsabilidad civil conjunta y solidaria de 18,8 millones de euros --ratificada por la Audiencia-- para hacer frente a las multas e indemnizaciones que puedan derivarse de una eventual condena.

Las obras fueron adjudicadas por 14,5 millones y, tras una modificación del proyecto, liquidadas por 32,3. La denuncia inicial de Plaza, basada en un informe del arquitecto José María Pemán, apuntaba un sobreprecio de 6,5 millones de euros --7,2 con IVA-- que el dictamen de Ríos duplica con creces: "el precio de las obras debió de ser de 15.554.785 euros (sin IVA), por lo que el sobrecoste pagado fue de 16.784.485, que supone un aumento del 107,91%".

OBRAS

Ríos admite, no obstante, un aumento del precio de 1,4 millones que situaría el coste final en 17 millones y el "sobrecoste injustificado" en 15.249.192.

"Sorprende la pasividad del propietario --añade-- que en ningún caso se ha defendido ni de la escandalosa reducción de la calidad, que le ha supuesto una gran pérdida de valor de lo construido y una dificultad añadida a su comercialización, ni del enorme sobreprecio pagado".

El dictamen desgrana una retahíla de anomalías que comienzan con la "falta de detalles" del pliego de prescripciones técnicas del concurso --la señala como "probablemente deliberada" y como "causa raíz de todos los sobrecostes"--, siguen en el proyecto definitivo con "una primera disminución de las calidades que se ofertaron y que formaban parte del proyecto sin que conste protesta por parte de la propiedad, en este caso Plaza" y continúan con unos trabajos iniciados nueve meses antes de disponer de licencia de obras.

Tras recibir la adjudicación, indica Ríos, "Codesport acomete, desde el primer momento, una disminución sistemática de las calidades de la construcción: empleo de hormigón gris y no blanco, cambios en las soleras, modificaciones en el acristalamiento, unión de la red de aguas fecales y las residuales, ausencia de cortafuegos y sustitución de los materiales proyectados por otros más baratos. A eso, indica el dictamen, se une la consideración de "aumentos de obra" para elementos contemplados en el proyecto o inexistentes empleos de hormigón.