El Partido Popular votó en el pasado pleno municipal en contra de una moción del PSOE, en la oposición, en la que se pide que el consistorio compre el matadero de la localidad, que hasta hace un año explotaba una empresa privada que hizo quiebra y dejó a sus 24 trabajadores en la calle.

El alcalde de la localidad, José Manuel Aranda, considera que la cuestión del matadero es muy compleja y que su suerte se resolverá en el procedimiento judicial abierto, que puede desembocar en una subasta pública de la instalación.

El hecho de carecer de matadero obliga a que los carniceros y ganaderos realicen el sacrificio de las reses en instalaciones de ciudades distantes. Además, los trabajadores que se quedaron sin empleo tuvieron que buscarlo en otros sitios. Los socialistas consideran que si el ayuntamiento se hiciera cargo del matadero la ciudad y su zona de influencia recibirían un mejor servicio y se crearían empleos.