El grupo municipal de Podemos-Equo en el Ayuntamiento de Zaragoza ha denunciado que la empresa de vehículos de alquiler con conductor Cabify elude la obligaciones que le impone la normativa aragonesa para los VTC, como hacer efectiva su disponibilidad pasados 15 minutos tras la solicitud del servicio por parte del usuario .

En una nota de prensa, la formación morada recuerda que esta empresa comenzó a operar en Zaragoza el pasado miércoles 4 de marzo y tras descargarse la aplicación de Cabify solicitó un servicio este viernes en el que una vez formalizada la petición, "en apenas un minuto", y se le informó tanto del trayecto con un mapa, el precio del servicio y en una ventana adicional en la que se especificaba que el coche pasaría a recoger al usuario en seis minutos.

Para Podemos, la actitud de la empresa infunde "fundadas sospechas" sobre su comportamiento respecto a otras limitaciones que establece la norma aragonesa para los VTC, como la imposibilidad de que recojan clientes por la calle mientras van circulando, como sí pueden hacer los taxis, o la de que la flota de estos vehículos esté concentrada en un determinado espacio cuando no se encuentren cubriendo servicios.

"La facilidad que Cabify traslada a los clientes para disponer de inmediato de un vehículo nada más descargarse su aplicación supone una burla a las instituciones que deben velar por el cumplimiento de la norma que regula su funcionamiento", afirma la citada la nota que considera que da la razón a las advertencias lanzadas de la formación sobre la actitud de este tipo de empresas, en cuanto se supo que Cabify iba a funcionar en Zaragoza.

Por ello considera que el Ayuntamiento está obligado a comprobar las irregularidades de Cabify y a extremar la supervisión del funcionamiento de esta empresa y de sus vehículos de alquiler por la ciudad, puesto que "pueden suponer una competencia desleal al servicio público del taxi, cuya reglamentación garantiza una prestación profesional y segura para usuarios y trabajadores".

También creen que la actitud de la empresa VTC confirma que está dispuesta a "aplicar sin reparo alguno todo tipo de estratagemas" que le permitan acaparar a medio plazo el mercado del alquiler de vehículos con conductor en Zaragoza, desplazando al servicio público del taxi y perjudicando a los propios usuarios, puesto que "en una situación de dominio por parte de la empresa de VTC, ésta no dudará en subir abusivamente los precios, como ya ha ocurrido en otras ciudades norteamericanas o europeas".

Podemos demanda al consistorio que está obligado a "redoblar la vigilancia y asegurar que la empresa cumple la normativa que regula su funcionamiento, mediante la actuación de la Policía Local y otros mecanismos administrativos".

"Los responsables municipales ya no pueden seguir echando balones fuera y trasladar la responsabilidad al Gobierno de Aragón, ante unos incumplimientos legales que afectan negativamente al servicio local del taxi, regulado por normativa local, y perjudicarán a la larga a la propia vecindad zaragozana potencialmente usuaria de los VTC", concluye la citada nota.