El Gobierno PSOE-CHA invitó ayer a Podemos a un encuentro para hablar de política y de todas las cuestiones que el líder de la formación morada, Pablo Echenique, considere oportunas. A pesar de estar carta en blanco, los podemistas rechazaron la invitación y se mantendrán firmes en su rol de oposición.

La portavoz de Podemos en Aragón, Maru Díaz, explicó que se trata de una convocatoria propia de «un socio de Gobierno» y no están dispuestos a asumir ese papel.

Díaz indicó que es el Ejecutivo el único responsable de la redacción del borrador de las cuentas del 2017 por lo que, añadió, no tiene sentido que quieran hacerlo con el resto de fuerzas de izquierdas. La portavoz recordó que el documento Lurte aprobado por las bases contenía la ruptura y alejamiento con el equipo de Gobierno. Y esto es lo que harán. «Actuaremos de oposición y hablaremos del presupuesto en las Cortes y cuando esté el borrador, mediante la presentación de enmiendas», señaló.

Díaz considera en referencia a la relación entre Podemos y el PSOE que «no es cuestión de resarcir la confianza. Se hace con hechos». No dijo lo mismo la diputada de Podemos y presidenta de las Cortes, Violeta Barba, que afirmó ayer durante su viaje a Huesca que para sentarse a negociar hay que recuperar, precisamente, la confianza.

El consejero de Presidencia, Vicente Guillén, invitó a la formación a hablar «de todo». El consejero de Vertebración, José Luis Soro, fue más duro en su «llamamiento a la responsabilidad». «No se puede estar en continua campaña política», señaló en referencia a Podemos, a quien acusó de «mirarse el ombligo» y «hablar de ellos mismos».

Para el presidente de CHA, es el momento de que la formación liderada por Echenique «levante la mirada y miren a la gente y sus derechos». H