A un mes de que se celebren las fiestas de La Cartuja, el proceso de elección de las reinas ha desatado la controversia en este barrio rural de Zaragoza. Ante la falta de voluntarias, la junta vecinal propuso que las niñas que este año han hecho la primera comunión fuesen reinas infantiles, aunque dejaban la puerta abierta a otras candidatas. Algunos vecinos rechazan este planteamiento por considerarlo discriminatorio.
"En la junta vecinal decidimos hablar con la niñas que hicieron este año la comunión para que sí querían fuesen ellas las reinas, porque así podían aprovechar sus trajes de comunión", afirmó ayer el alcalde de La Cartuja y presidente de la junta vecinal, José Ramón (CHA).
Esta decisión ha suscitado críticas entre algunos vecinos. Para la madre de una niña del C.P. Angeles Escoriaza, que prefiere no revelar su identidad, se trata de "una decisión excluyente y discriminatoria", por no partir de la pluralidad de creencias. "Mi hija, que no ha comulgado, hubiera debido poder elegir ser reina o no, independientemente de que a posteriori quiera o no", afirma esta madre, que echa en falta una convocatoria pública y abierta, ya que se enteró del proceso por su hija.
El alcalde negó ayer que la decisión haya respondido a motivos religiosos ni excluyentes: "Comentamos coloquialmente que fueran reinas las de la primera comunión, como podíamos haber dicho que fuesen las niñas de siete años o cualquier otro grupo". José Ramón añade: "En ningún momento ni la junta ni el alcalde ni la comisión han negado a nadie la opción de ser reina", y achaca las críticas a una cuestión "de pura y dura política".
La madre asegura que no se trata de política, sino de principios básicos como el respeto mutuo. Reconoce que desde la comisión sí aceptaron a posteriori que podían hacer un hueco en el programa para incluir una foto más, si su hija quería. Sin embargo, esta familia decidió no forzar la situación después de que el alcalde contestara, según ellos, con una frase indefinida a la pregunta de qué iba a suceder con las niñas que no habían comulgado.
Víctor Pablo, vocal de la junta vecinal por el PSOE, afirmó ayer que desde el principio se comunicó en el pleno de la junta y a varias madres que la propuesta planteada mantenía la puerta abierta a la participación de cualquiera. Sin embargo, el presidente de la Asociación de Vecinos Gerónima Zaporta, Rafael Urchaga, crítico con la medida, afirmó ayer no recordar que se hubiera dado esa información y trasladó a este diario el contenido textual al respecto del acta del pleno del 5 de mayo: "Víctor Pablo pide la colaboración para la comisión de fiestas. Este año no hay reinas aunque se pueden plantear otras opciones: infantiles o de mediana edad".
