A la Jefatura Superior de Policía de Aragón le preocupa el alarmante aumento del número de robos con violencia e intimidación en Zaragoza. Para tratar de erradicarlo, el jefe superior Juan Carlos Hernández Muñoz ha decidido crear un grupo policial especializado en la investigación de estos delitos no solo para aclarar casos que están sin resolver, sino para realizar labores de vigilancia.

Una labor en la que no solo se implicarán los agentes pertenecientes al grupo de Policía Judicial pertenecientes a la Comisaría Centro de Zaragoza, sino también los agentes de la Brigada de Seguridad Ciudadana. La coordinación entre las diferentes unidades es fundamental, señalan fuentes policiales a este diario que señalan que la puesta en marcha de estos grupos suele realizarse cuando los índices delincuenciales aumentan. Por ejemplo, otros jefes superiores como José Villar del Saz pusieron en marcha un grupo especializado en robos de trasteros que, actualmente, no está activo puesto que la comisión de este delito ha descendido de forma notable y porque los delincuentes que los llevan a cabo, ya no son bandas organizadas. No significa que no se produzcan. De hecho, a principios de año hubo un repunte, especialmente, en barrios como La Jota.

En este caso, el grupo especializado de la Policía responde al aumento de los robos con violencia. Tan solo entre los meses de enero y febrero, según cifras de la propia Jefatura Superior de Policía de Aragón, se han producido 38 detenciones de jóvenes que han intimidado o robado de forma violenta a viandantes zaragozanos.

Los autores de estos robos no reúnen ningún perfil especial, aunque, como en otros delitos, hay predilección por las personas con limitaciones físicas. No obstante, ha habido adolescentes víctimas de estos ladrones que no actúan como bandas organizadas como tal. La mayoría de los casos han sido robos de teléfonos móviles, ya que son objetos con un valor en el mercado elevado y que son fáciles de revender en el mercado negro.

Destacan estas mismas fuentes que este aumento de robos no solo se producen por mayores de edad, sino también por menores, siendo varios de ellos extranjeros no acompañados. De ahí que la Jefatura Superior de Policía intensificara la vigilancia de la presencia en las calles de estos jóvenes.