El PP, el partido que "más entiende las demandas de los ciudadanos y el que más las incorpora", el partido que en Aragón está "libre de corrupción" y el que "ha bajado impuestos" manteniendo el "gasto social". El secretario general del PP en Aragón, Octavio López, hizo ayer un triunfalista balance del año que incluyó una apuesta para las próximas elecciones: el PP "volverá a ganar", con una mayoría "suficiente" para gobernar. Por eso ni se plantean pactos globales con el PSOE --"en ningún caso", dijo--, al que sí tienden la mano para alcanzar acuerdos puntuales en medidas de regeneración democrática.

López pintó un panorama muy alejado de las continuas protestas en la calle, un Aragón que ha experimentado ya "el quinto trimestre de crecimiento" y en el que se ha reducido la cifra de parados "en 10.000 personas en un año". Es cierto, admitió, que las mejoras "tardarán" en llegar a las personas "más débiles", y por eso apostó por el refuerzo de las políticas sociales en aras de la "solidaridad". "Los ciudadanos querían un Gobierno austero, que generase estabilidad y que bajase los impuestos. Y el Gobierno de Aragón ha hecho todo eso", indicó López.

Quizás consecuencia de esta visión de la sociedad aragonesa, López adelantó que los resultados electorales van a consolidar una victoria del PP, aunque en un parlamento autonómico "mucho más fragmentado y menos estable" que el actual. Por ello, el PP no está valorando, "en ningún caso" una coalición con el PSOE, tras las elecciones autonómicas y municipales. "No lo veo en Aragón", destacó. En cambio, el PP sí que hizo un llamamiento al PSOE y al resto de fuerzas políticas para pactar y aprobar propuestas en materia de regeneración política, ya que están "deseosos" y "abiertos" a llegar a un punto de encuentro.

López reconoció, como ya adelantó este diario, que el documento presentado por el PP en materia de regeneración política y lucha contra la corrupción coincide en un 80 % con el defendido por el PSOE aragonés, por lo que sería "bueno" lograr una "aproximación" antes de las elecciones. Reconoció, no obstante, que el acuerdo "no es fácil", sobre todo porque la oposición está "nerviosa" tras la aparición de "nuevas fuerzas en la izquierda".