El portavoz de Agricultura del PP en las Cortes, Ramón Celma, ha advertido hoy de que el ataque de los lobos a las ganaderías se ha convertido en un "problema" al que el Gobierno de Javier Lambán "debería dar una solución" y "asumir los costes económicos" que suponen las "más de 300 ovejas muertas".

En una rueda de prensa, Celma ha destacado que las comarcas de Los Monegros y Ribagorza son las más afectadas por los continuados ataques del lobo, que pone "en riesgo la conservación del medio natural y los modos de vida" de sus gentes, algo en contra de uno de los objetivos principales del programa del actual gobierno, la lucha contra la despoblación.

Tras el último intento del Gobierno de Aragón de "silenciar" a los ganaderos, ha dicho Celma, el PP ve "inasumible" que se plantee la convivencia entre el lobo y los ganaderos y por ello planteará una iniciativa para que se redacte un plan de gestión que ataje cuanto antes la problemática y "el gran riesgo" que corren los municipios.